La técnica de vitrificación es una de las técnicas que más revolucionaron el mundo de la Reproducción Asistida. Consiste en una congelación rápida, tanto de embriones como de ovocitos, mediante la cual se consiguen unas tasas de supervivencia tras su descongelación mucho mayores que con la congelación lenta.

¿Cuándo se realiza?

La vitrificación tiene lugar, tras el cultivo y desarrollo embrionario dentro del laboratorio FIV, en aquellos embriones de mejor calidad, con mayores posibilidades de dar lugar a un embarazo.

Esta técnica se puede realizar para dar la posibilidad de embarazo a embriones de buena calidad que queden restantes tras la transferencia embrionaria. De esta manera, tendremos la opción de tener futuros hermanos y hermanas del mismo ciclo. De la misma forma, la vitrificación ha revolucionado aquellos casos en los cuales, por riesgo de hiperestimulación ovárica, no podrían realizar la transferencia embrionaria.

¿Cómo se realiza?

La vitrificación, tanto de óvulos como de embriones, es una técnica en la que la calidad de estos no se ve afectada en ningún momento.

Los principios que sigue la vitrificación se basan en “deshidratar” las células, es decir, eliminar el agua que contienen sus células, para ser sustituida por un crioprotector; unas sustancias que le protegen de la formación de hielo en sus estructuras. Esta agua, si no se eliminase, es lo que haría que bajase en gran medida la supervivencia de los gametos y embriones.

Posteriormente, los embriones u óvulos son depositados en unos soportes especiales para estos y sumergidos en nitrógeno líquido a -186ºC.

¿Qué pasa después de la descongelación?

Las tasas de supervivencia tras la descongelación cuando se realiza una vitrificación varían, en primer lugar, dependiendo de si son óvulos o embriones.

• En el caso de EMBRIONES, la tasa de supervivencia ronda el 95%, dependiendo en gran parte de los medios con crioprotectores que se utilicen, así como del personal formado en esta técnica.
  De la misma forma, el día en cual son vitrificados los embriones también es muy importante, teniendo mejores tasas de supervivencia con embriones vitrificados en Día 5 o 6 en estadío de blastocisto, que en Día 3. La razón de esta diferencia en supervivencia se basa en el número de células que posee en los diferentes estadíos. En el día 3, los embriones poseen una media de 8-9 células, por lo que la no supervivencia de una de ellas, supone una pérdida de un 10% de su material aproximadamente. En cambio, en el estadío de blastocisto, este tiene una media de 200 células, por lo que la no supervivencia de una o 2 de ellas, no supone tanta pérdida.
• En el caso de ÓVULOS, la tasa de supervivencia es muy dependiente de los protocolos de cada técnica, aunque a día de hoy, generalmente, la mayoría de las clínicas tienen una supervivencia en desvitrificación mayor o igual al 80%.

¿Cuánto tiempo pueden estar vitrificados?

Una de las preguntas más frecuentes es hasta cuándo pueden estar congelados o vitrificados los embriones o los óvulos. Y la respuesta es sencilla: no tienen límite de tiempo, eso sí, siempre que estén con nitrógeno a temperaturas de aproximadamente -186ºC.

Por este motivo, la vitrificación ha revolucionado las técnicas de reproducción Asistida, pudiendo optar por una preservación de la fertilidad al vitrificar los óvulos o disponer de futuros bebés sin tener miedo a que la reserva ovárica pueda disminuir.